Señor Director:

He seguido con atención lo informado por "El Mercurio" (miércoles 29) respecto del dirigente de la CUT contratado por el Ministerio del Trabajo. Y no ha dejado de sorprenderme que se trate de uno de los dos funcionarios respecto de los cuales solicitamos como Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam) un pronunciamiento a la Contraloría General de la República, debido a su negativa para informar sus permisos sindicales, logrando con ello recibir una remuneración del Estado que no le correspondía percibir.

El dictamen de la Contraloría que ha citado "El Mercurio" estableció que cabía iniciar un sumario en su contra y se debían adoptar las medidas para que devolvieran las remuneraciones que habían recibido de manera irregular. Sería bueno que se den a conocer públicamente las medidas que se han adoptado para cumplir dicho dictamen.

Cuando el país discute leyes y regulaciones para garantizar la probidad y una nueva ley laboral, es necesario que la ciudadanía tenga la certeza de que las autoridades las aplicarán por igual, en todos los casos, incluidos los dirigentes sindicales, cuya probidad debiese ser incuestionable. De lo contrario, ¿qué confianza se puede tener que las leyes no se conviertan en letra muerta?

Magdalena Krebs K.
Arquitecta Ex directora Dibam