Raúl Neira B.

Los resguardos a tomar ante selecciones fuertes

El primer apunte de Waldemar Méndez sostiene que "en el último Mundial, Brasil y Holanda no tuvieron problemas para jugar de contra; no les importa estar parados mucho tiempo en campo rival. La mayoría de las selecciones no son de estar permanentemente presionando".

El segundo, tiene que ver con la pizarra que ayer propuso el DT casildense. "Cuando juegas con tres en el fondo se termina pagando, y caro, ante rivales de jerarquía. Brasil atacó poco y ganó. Lo mismo sucedió el año pasado ante Uruguay y hace poco con Irán. Hay partidos en que hay que jugar con cuatro y no quedar tan expuestos. Cubrir el ancho de la cancha con tres defensas y ante delanteros rápidos, se paga".

Héctor Pinto, técnico campeón con Universidad de Chile en 2004, matiza la historia. "Jugar con tres es dejar demasiados espacios, pero también llegan (Eugenio) Mena y (Mauricio) Isla; entonces, no sé si es tan marcada la línea de tres. Es cosa que los tres funcionen concentrados, y lo mismo pasa en una línea de cuatro: sueltas un lateral y quedan tres. El problema es cuando Chile ataca, porque deja lugares que delanteros rápidos pueden aprovechar".

Siguen los problemas en la delantera

Solo dos llegadas tuvo Chile ante Brasil. Y ambas de pelota detenida: primero fue Alexis Sánchez y luego Matías Fernández. Waldemar Méndez , analista del CDF, pone paños fríos: "Se jugó un partido más que interesante, más que aceptable. El rival también juega. Es muy difícil generar tantas situaciones de gol a nivel de selecciones. Argentina se enfrentó a El Salvador y le costó".

Al "Nano" Díaz, en cambio, no le gustó mucho la propuesta de la Roja. "Cuando juega con un delantero no le va muy bien. Ese experimento no resulta, porque Alexis Sánchez estuvo muy solo y siempre le hicieron doble marca. Para mí, eso del '9' falso no corre. Chile siempre se ha visto mejor con Alexis y Eduardo Vargas, y desde más atrás con Arturo Vidal, Matías Fernández o Jorge Valdivia. No hubo volumen ofensivo, además, porque (Mauricio) Isla y (Eugenio) Mena pasaron muy poco y de los volantes no apareció nadie. Sí fue un equipo ordenado. No me parece que se haya jugado bien: cuando Brasil apretaba, hacía daño", reflexiona.

Rodolfo Dubó , mundialista de España 1982, coincide: "De mediocampo hacia arriba Chile generó muy poco peligro. Alexis Sánchez estaba muy solo. David Pizarro hubiese sido fundamental para regular la parte ofensiva y defensiva".

La posición de Arturo Vidal no logra convencer

El volante de la Juventus no cuajó un buen partido ante los pentacampeones. "Cuesta definir de qué jugó: si por la derecha, por la izquierda o de enganche. No me gustó. No lo vi ubicarse bien ni acompañar arriba. Se perdió", sostiene Fernando Díaz , entrenador de Ñublense.

"El fuerte de Arturo Vidal es cuando arranca de atrás con balón dominado o aparece, por sorpresa, por el sector derecho. Jugando de espaldas al arco, como sucedió ante Brasil, no tuvo potencia", agrega.

Para Miguel Ángel Gamboa , mundialista de España 1982, el jugador formado en Colo Colo "no fue muy gravitante, le he visto partidos mejores. Quizás no está al 100 por ciento en el aspecto futbolístico".

Las razones son claras y las expone: "Vidal no es un medio creativo, jugar tan arriba no sé si sea bueno para él. Hay jugadores que no sienten jugar así, por más que tenga calidad individual. No tiene panorámica, no es habilitador de esencia, no es Jorge Valdivia, por dar un nombre. Es de ir de más de atrás, de salida y de marca, más que exclusivamente de creación... Quizás contra Guatemala pueda andar muy bien en esa posición, pero ante Brasil es otra cosa", sentencia el zurdo.

Alejandro Hisis , seleccionado de Chile en las clasificatorias a México 1986 e Italia 1990, opina bastante parecido. "Arturo se ha caracterizado por ser polifuncional y para los que estamos en el fútbol no es anormal que juegue en otro puesto. Recordemos que fue líbero con Claudio Borghi... Son fórmulas que ocupamos los técnicos, pero claro: no es el puesto donde mejor ha rendido, porque es un volante mixto, de estar al lado del volante de contención y salir en libertad y por sorpresa".

La zaga no sumó rostros nuevos

Gonzalo Jara, Gary Medel, Miiko Albornoz y José Rojas fueron los defensas centrales que Jorge Sampaoli convocó al último Mundial. Ayer, ante Brasil, jugaron los tres primeros. Y de no estar lesionado, el capitán de Universidad de Chile también hubiese sido parte de la citación.

"Son los mismos, recambio no hay. Hay chicos que prometen y el técnico no los hace jugar. Va a la segura, mal que mal Medel y Jara han jugado dos copas del mundo", dice Humberto Cruz , zaguero de Chile en el certamen de 1962.

El hombre que alguna vez le bajó los pantalones a Pelé no cree en la falta de candidatos. "Sampaoli debe darle tiraje a Igor Lichnovsky, Enzo Roco y Erik Pulgar, el problema es que a Pulgar lo hace jugar de volante... Sabemos que faltan dos zagueros grandes, entonces que jueguen todo el partido y no 20 minutos y los saque. Si no les das confianza, no habrá nunca un nuevo central", remarca.

Mauricio Isla es otro caso: no ha reeditado sus mejores actuaciones, pero nadie complica su titularidad. "No es el que todos estamos acostumbrados a ver: le falta chispa y la llegada potente a la línea de fondo para sacar un centro peligroso. Quizás es por la poca continuidad que ha tenido en Inglaterra", dice Gabriel Mendoza , campeón de América en 1991.