Me entusiasman los avances científicos de cada día. Algunos sobresalen, como los nuevos sistemas 3D para aprovechar las imágenes satelitales que presentó Ian Howatt, el jueves pasado: todos quienes estudian los campos de hielo, las masas de nieve en la cordillera deberían echarle el ojo.

También aparecen frescas recomendaciones prácticas.

1. Pésese los miércoles. La Universidad de Cornell en EE.UU., en su laboratorio de alimentación, recomendó sincerar el peso ese día. Computaron el sentido de culpa del domingo en la noche y el optimismo de los viernes temprano. "No se preocupe", dicen, "el peso siempre varía". Las bajas de peso se producen de lunes a viernes; pésese en esos días, pero si se pesa una vez a la semana, elija el miércoles.

2. Guarde objetos valiosos en el tubo dentífrico. La Dra. Claire Nee, de la Universidad de Portsmouth, en el Reino Unido, estudió el robo de domicilios con ladrones experimentados y ladrones novatos, voluntarios. Les puso un traje que muestra movimientos, para no tener que basarse en sus descripciones, y los puso a robar en casas reales y casas virtuales. Los novatos entran por delante, los experimentados, por detrás. Los novatos pasan la misma cantidad de tiempo en los cuartos del domicilio; los experimentados son más rápidos y se concentran en las áreas más "productivas" de la casa: dormitorios, escritorio, living; rara vez entran al baño o registran la cocina y tienden a sustraer unos pocos objetos valiosos, ni miran los baratos; cosechan más que los novatos. Por ello, esconda sus valores poniéndose en el lugar del intruso. Y no bote a la basura el tubo dentífrico con el diamante adentro.

3. No usamos los inhaladores apropiadamente. En EE.UU., solo el 16% de los usuarios lo hace bien. Estos son los errores más comunes: no sostener el inhalador en su lugar, por a lo menos 10 segundos, tras disparar; mala ubicación del inhalador; disparar con desgano y sin energía; no exhalar antes de disparar; no agitar el inhalador antes de disparar. El estudio se publica en el último "Annals of Allergy, Asthma and Inmunology".

4. Los niños de 3 a 5 años pueden aumentar su generosidad. El jueves, en la revista "Current Biology", Jean Decety, siquiatra y sicólogo de la Universidad de Chicago, con su equipo, escribieron que estuvieron pendientes de la actividad cerebral de niños entre los 3 y los 5 años, para ver si eran espontáneamente generosos. A cada uno del grupo le entregaron 10 calcomanías y les anunciaron que iba a entrar un niño que no tenía nada. En promedio, los niños compartieron con el nuevo poco más de una calcomanía. El proceso cerebral se desarrolló en dos etapas: una, automática, que evaluaba ventajas y desventajas de desprenderse del objeto, y la otra, más reflexiva. Esta suscitaba la generosidad. Los párvulos desarrollan el sentido moral, es posible estimular su reflexión sobre la generosidad. Apropiado para esta época.