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Viernes 28 de noviembre de 2014
"Quiero hacer un llamado a que cuidemos entre todos el clima político"
Presidenta Michelle Bachelet defendió el proceso de reformas y aseguró que su Gobierno no pretende hostigar al empresariado. "Todo proceso de cambio genera fricciones, dudas, versiones contrapuestas, reclamos, ansiedad", afirmó.
María José Ahumada
Con un discurso que se prolongó por 18 minutos, la Presidenta Michelle Bachelet fue la encargada de clausurar ayer el encuentro Enade 2014, que se realizó ayer en CasaPiedra.
Cerca de las seis de la tarde, portando un vaso con agua en sus manos, la Mandataria caminó hasta el podio e inició su intervención agradeciendo la oportunidad de generar un "diálogo tan relevante sobre la relación entre la empresa, la sociedad y el Estado".
Bachelet defendió las reformas que impulsa su Gobierno, aseveró que están las condiciones en el país para llevarlas a cabo y se refirió al proceso de desaceleración económica.
"Sé que algunos pensarán que debido a la desaceleración económica que nos afecta, este no es un buen momento, y que debemos esperar a que mejoren las condiciones. Creo que no es un diagnóstico correcto (...) Seamos claros, la desaceleración que vivimos no es primariamente un problema de incertidumbre producto de las reformas que hemos promovido", dijo.
También destacó que no es posible que exista desarrollo "sin una economía productiva y dinámica", y agregó que para que ello ocurra deben existir políticas e instituciones adecuadas. Por lo mismo, hizo alusión al título del encuentro: "Crear sociedad entre todos". "Hace referencia a una perspectiva fundamental que ilumina esta tarea que nos hemos propuesto: que la sociedad es una construcción colectiva, hecha de diálogo, diferencias, propuestas y, sobre todo, de cooperación", aseveró.
Proceso de reformas
Recordando su cuenta del 21 de mayo, la Presidenta expresó que "Chile no parte desde cero". Y al mismo tiempo reiteró que existe un cambio de ciclo en el país. "Hoy es el momento de emprender las reformas que nos permitan avanzar consistentemente hacia allá", dijo la Jefa de Estado, quien defendió la idea de que un crecimiento económico que conserve las desigualdades no es funcional para la paz social, la cohesión y el desarrollo.
Bachelet continuó su intervención señalando que "el camino hacia este país justo y productivo al que aspiramos es complejo. No estará exento de dificultades. Todo proceso de cambios genera incertidumbres. Todo proceso de cambios genera fricciones, dudas, versiones contrapuestas, reclamos, ansiedad. Es cierto".
En esa misma línea entregó un mensaje a la clase política y también a los empresarios presentes: "Quiero hacer aquí, frente a ustedes, un llamado a que cuidemos entre todos el clima político. Y este llamado incluye a la clase política en general, y también a ustedes, que son actores no solo del crecimiento y la inversión, sino también del clima social. El Gobierno jugará un rol constructivo y colaborativo. No tengan dudas de aquello; espero de ustedes lo mismo".
La Presidenta sostuvo que "ese diálogo, por cierto, tiene reglas básicas de responsabilidad y de respeto a las que no vamos a renunciar". También expresó que "hemos demostrado, en los dichos y en los hechos, que creemos en un diálogo sin descalificaciones, que creemos en la mesa común y abierta como mejor herramienta para solucionar nuestras diferencias y encontrar caminos de convergencia".
En tanto, Bachelet reconoció la complejidad de la reforma educacional y aseguró que "todos los actores están convocados hoy a la mesa de esta reforma. Todos han sido y serán escuchados".
Luego sostuvo que "no hemos estado ni estaremos en una política de hostigamiento hacia el sector empresarial".
Divergencias inevitables
Casi al término de su intervención, Bachelet comentó que "no podremos avanzar y aprovechar nuestra inédita oportunidad de desarrollo si nos paralizamos en el temor al debate y a las diferencias". Fue así como llamó a confiar en la "madurez cívica de nuestra sociedad".
"Quiero ser tajante: prefiero asumir y conducir las inevitables divergencias que crean las reformas que hay que hacer, antes que aceptar resignada que se frustre esta oportunidad de desarrollo", agregó.
La Presidenta de la República también llamó a los empresarios "a no ser espectadores en este desafío, sino que a asumir un rol protagónico en la construcción del Chile de hoy y, sobre todo, del país del mañana".