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Cartas
Martes 23 de septiembre de 2014
Paro en línea aérea: Viaje de pesadilla
Señor Director:
La línea aérea Air France nos tiene atrapados en París. Por razones internas de la empresa los pilotos están en huelga y los pasajeros somos rehenes o víctimas de esa situación.
Es increíble, pero mi vuelo de regreso del 21 de septiembre fue cancelado sin aviso; la alternativa que me ofrecieron para el lunes 22, día en el que tanto mi señora como yo deberíamos estar en nuestros respectivos trabajos, también fue cancelada con un aviso en la página web y no tenemos información alguna de cuándo podremos regresar a nuestros hogares y quehaceres. Según una funcionaria de la empresa en el aeropuerto Charles de Gaulle, no hay certeza ni seguridad sobre disponibilidad de vuelos. Peor aún, leo en las noticias que la huelga de pilotos de AF se extenderá hasta el viernes 26. Lo más indignante es que la línea aérea no informa a los pasajeros y estamos en la más completa tiniebla sobre lo que ocurrirá en los próximos días, por lo que no podemos hacer planes laborales ni familiares.
Este conflicto laboral, por cierto, no puede haber sido una situación sorpresiva para la línea aérea. Air France nos debe una explicación ya que tiene que haber sabido con anticipación los problemas que ocurrirían en caso de una huelga y no adoptó las medidas apropiadas avisando a sus clientes, a las agencias de viaje, ni a los operadores turísticos, para que se tomaran las precauciones o para evitar molestias e inconvenientes para los pasajeros.
Como siempre los ciudadanos, usuarios, que pagamos los servicios con anticipación y respondemos por nuestras obligaciones estamos desprotegidos y a merced de la desidia de empresas que no responden por estos daños y perjuicios, muchas veces inmedibles. ¿Qué confianza podemos tener en un sistema que no responde con responsabilidad y respeto por las personas? Es tiempo que las autoridades de alguna manera protejan a sus ciudadanos de estos abusos.
Juan Pablo Varela Aguirre