Señor Director:

En relación con el debate sobre la efectividad y fundamento técnico de la propuesta de reglamento de la Ley de Etiquetado de Alimentos y su Publicidad, nos parece necesario aportar algunos antecedentes respecto de la experiencia internacional en esta materia.

Diferentes países han avanzado en regular la entrega de información nutricional a los consumidores, con la finalidad de aportar elementos que les permitan tomar una decisión informada respecto de sus hábitos alimentarios. No obstante lo anterior, los parámetros fijados en Chile se alejan radicalmente de la experiencia internacional, dejándonos como el país más extremo del mundo en este ámbito.

Por ejemplo, en el caso del sodio, nuestro país está fijando el límite máximo en 400 mg por cada 100 gr, mientras otros países como Inglaterra o Ecuador lo fijaron en 600 mg y Perú en 540 mg por cada 100 gr de producto. Lo mismo ocurre con azúcares o grasas saturadas, donde la exigencia impuesta por Chile es mucho más severa que lo observado a nivel mundial.

Estos límites ponen en riesgo la efectividad del reglamento, ya que son técnicamente imposibles de cumplir para la industria y no aportarían información útil al consumidor. Asimismo, no permite comparar alimentos, ya que al ser tan estricta la norma, el 90% de los productos quedaría etiquetado como "exceso de".

Como industria de alimentos hemos impulsado proactivamente iniciativas que apuntan a entregar mayor información a los consumidores. Estamos convencidos de que en una materia tan sensible e importante para la ciudadanía hay que recoger la experiencia internacional. Ser el más extremo no necesariamente es sinónimo de ser pionero.

Marisol Figueroa
Gerente Técnico
Asociación de Alimentos y Bebidas de Chile