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Cartas
Viernes 29 de agosto de 2014
Desaceleración en la ópera
Señor Director:
Los últimos acontecimientos relacionados con la ópera en Chile hacen predecible, al igual que en la economía, que se produzca una desaceleración que pueda llegar a que desaparezca.
Este género artístico, para el cual hay casi 200 teatros en todo el mundo, fue durante gran parte del siglo XX el espectáculo de mayor relevancia en el quehacer nacional, y no solo limitado a la ciudad de Santiago.
A mediados de 1974 se inició un paulatino resurgimiento de la ópera, a cargo de la Sociedad Chilena de Amigos de la Ópera, a la que tuve el gran agrado de pertenecer y aun presidir en sus últimos años, cuya labor se prolongó por cerca de ocho años, siendo responsable de la realización de los espectáculos líricos en el Teatro Municipal de Santiago, y en Valparaíso y Viña del Mar, cada vez con más éxito y profesionalismo.
Entregadas estas funciones en 1982 a la Corporación Cultural de la Municipalidad de Santiago, que siguió en esa senda, acertadamente designó en 1986 como su director general y artístico a quien ya pertenecía a su directorio, Andrés Rodríguez, cuya labor extraordinaria ha elevado al Teatro a categoría internacional, como lo han reconocido revistas especializadas que destacan sus merecimientos y logros artísticos, entre ellos la formación de cuerpos estables de primer nivel -orquesta, coro y ballet-, además del estamento técnico, y ello durante gobiernos de distintos signos políticos.
Pero todo esto está por cambiar, y no para mejor. Andrés Rodríguez ha sido notificado que sus labores terminarán a fines de 2015, sin explicación específica.
A esto se agrega la negativa a seguir con la tradición de más de 100 años de presentar en la gala del 18 de septiembre una función de ópera, aduciendo que debieran preferirse creaciones de la cultura chilena, como si la cultura tuviera fronteras.
Como adicto a la ópera, no me cabe sino lamentar lo que está ocurriendo y esperar un milagro que revierta la situación, lo que parece muy improbable.
Arturo Alessandri Besa