Hoy estamos frente a la oportunidad de conformar en la región una gran plataforma para la innovación, el emprendimiento y el desarrollo económico y social de cada uno de nuestros países, además de generar un modelo conjunto propio, como nunca antes en la historia, por la necesidad de ampliar las fronteras geográficas e ideológicas.
Las condiciones están. Desde hace un tiempo venimos observando cómo Perú, Colombia y México se han transformado en una extensión natural del mercado chileno, así es que celebramos y apoyamos cada paso que da el gobierno y el consejo empresarial para consolidar la Alianza del Pacífico. En diciembre, a estos esfuerzos se les sumaron tres actores llamados a concretizar la unión: Mujeres del Pacífico, la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica (ASELA) y la Red de Inversionistas Ángeles del Pacífico.
Debemos hacer negocios, de llevar a nuestros mercados al siguiente nivel, de generar códigos de lenguaje común, de ser líderes en innovación y dejar de tratar de imitar modelos extranjeros como el de Silicon Valley o Israel, y armar un modelo propio, de abrirle las puertas al mundo a nuestras pymes, de ampliar nuestro pequeño mercado a más de 600 millones de potenciales clientes, y para lograrlo necesitamos conocernos, conversar, aprender el uno del otro, generar redes de trabajo y cerrar negocios, pero para todos, no solo para los grandes.
Vemos también en la innovación un potente eje para el trabajo conjunto. En este tema, tenemos desafíos similares en cada uno de los países y se están haciendo esfuerzos desde lo público y lo privado, pero el gran cambio se va a generar cuando ambos sectores trabajen juntos para aprovechar las oportunidades. En este tema las mujeres caminábamos por la vereda del frente. Hasta ahora, porque Mujeres del Pacífico creó el Lab de Innovación I+M que por primera vez reúne a las mujeres a hablar de innovación, pensar en ella y levantar nuevas ideas, pero conectadas en una gran red regional.
Las condiciones y la tecnología para crear el cambio están. Los emprendedores, productos, consumidores e inversionistas también. Solo falta bajar a lo concreto los largos discursos y ponernos a trabajar.
Fernanda VicentePresidenta de Mujeres del Pacífico