Esta es una mejor actuación que película porque el oficio de la actriz Naomi Watts salva las imperfecciones en la que cae el director alemán Oliver Hirschbiegel ("La caída") en la recreación de los dos últimos años de vida de la Princesa de Gales. El foco de esta biografía es el amor verdadero de la princesa del pueblo, con el cirujano paquistaní Hasnat Khan (la ex estrella de la serie "Lost", Naveen Andrews) y lo que muestra la dirección de Hirschbiegel son trazos gruesos que pueden caer en el cliché, pero que son de alguna manera rescatados de la desgracia total por la mimetización realizada por Naomi Watts como Diana de Gales. En lo formal y el envoltorio, la película luce bien, pero el interior de esta caja no es el regalo que uno esperaría de los grandes nombres involucrados en esta biografía.
Biografía. 2013. 113 minutos. 14 años.
"El quinto poder"Con espíritu pedagógico, el irregular director norteamericano Bill Condon, cuya carrera ha fluctuado entre las notables "Dioses y monstruos" y bodrios como el final de "Crepúsculo", expone sensatez creativa en esta biografía sobre el creador de WikiLeaks, Julian Assange. Interpretado con talento por el actor de moda, el inglés Benedict Cumberbatch, además del escándalo de Assange, esta es la historia de una amistad fracturada y de secretos dentro de los secretos. El injustamente olvidado Daniel Brüh es Daniel Domscheit-Berg, el socio de Assange en su cruzada por la verdad, pero a medida que pasa el metraje nos queda claro que el creador de WikiLeaks, con carácter mesiánico, carismático, casi etéreo, ostenta máscaras debajo de las máscaras y el punto de vista de este Sancho Panza que encarna Daniel Brüh, impregna un relato cumplidor y aclarador. Julian Assange no quedó nada de feliz con este semblante: un punto a favor que aleja de la condescendencia a este filme, sí, inferior a "Red Social", la joya de David Fincher sobre otra leyenda de Internet, Mark Zuckerberg. Pero "El quinto poder" resulta efectivo.
"The Fifth Estate". 2013. 128 min. 14 años.