Rienzi Franco Y Davied Jaime
En la reunión del comité político de este jueves fue el instante en el que el Presidente Sebastián Piñera, en conjunto con los ministros que integran la instancia, decidió que el Ejecutivo saldría a fijar su posición respecto del caso de los tres soldados bolivianos detenidos por ingresar ilegalmente al país.
Veinticuatro horas después, fue el propio Mandatario el que ayer hizo pública la postura del Gobierno en un punto de prensa que se efectúo en el Patio de los Naranjos de La Moneda. Ahí, Piñera hizo un llamado "al Presidente Morales a actuar con mayor respeto por la verdad, con mayor respeto por el derecho internacional y a aprender que el orden jurídico y el estado de derecho de nuestro país lo vamos a proteger y resguardar siempre".
A su vez, la intervención de Piñera surgió luego de que su homólogo boliviano, Evo Morales se refiriera al caso críticamente. Y, aunque ya lo había hecho en otras oportunidades, lo que terminó por incomodar en círculos diplomáticos fue que Morales hiciera sus declaraciones en la sede de las Naciones Unidas.
En una de sus afirmaciones, el Mandatario paceño dijo que en Chile, los conscriptos eran "rehenes políticos". Ante esto, Piñera contestó que los militares fueron arrestados "no por ser bolivianos, no por ser soldados, sino que por haber ingresado ilegalmente a territorio chileno portando armamento de guerra, lo que según nuestra ley de control de armas constituye un delito".
Y agregó el Jefe de Estado que la "actuación de Carabineros de Chile, de la Fiscalía Nacional y del Poder Judicial se ha ajustado estrictamente a derecho, y ellos han cumplido debidamente con su deber".
En este punto, Piñera dijo rechazar, "con una cierta indignación, las infundadas e irresponsables afirmaciones que han hecho autoridades del Gobierno boliviano, respecto a un eventual involucramiento o complicidad de Carabineros de Chile con el tráfico y contrabando que ocurre en esa zona".
Y luego ratificó que "en todas estas actuaciones todas las instancias de nuestro país ha cumplido estrictamente con las normas del derecho internacional y muy especialmente con la Convención de Viena, que dice relación con las relaciones consulares entre países y con los derechos de las personas que se encuentran detenidas".
Casi en paralelo a su alocución, en la Región de Tarapacá se realizaba el arribo de los tres militares bolivianos a dependencias de la Fiscalía Regional de Tarapacá para prestar declaración. La de ayer fue la primera vez que la totalidad de los involucrados entrega su testimonio de lo sucedido el 25 de enero. Esto, porque antes sólo uno de ellos había aceptado realizar la diligencia judicial.
Fue a este hecho al que también hizo mención Piñera después de los comentarios efectuados por autoridades del vecino país en orden a que el tema se resuelva con prontitud: "Quisiera destacar que ha sido la falta de colaboración de los soldados bolivianos lo que ha impedido una solución más pronta y tal vez más oportuna a este caso", precisó el Mandatario.
Otro de los aspectos que quiso especificar Piñera apuntó a establecer que la zona por la que ingresaron los uniformados está debidamente delimitada, por lo que dijo que los "soldados bolivianos que presuntamente resguardan esa frontera, conocen o debieran conocer su límite".
La réplica desde La Paz
El Presidente de Bolivia, Evo Morales, está participando de la III Cumbre de países de América del Sur y África (ASA) en Guinea Ecuatorial. En esa instancia, hizo mención a su aspiración marítima.
Debido a esta gira de Morales, fue el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, quien indicó que el Gobierno de Chile "se está comportando de una manera poco amistosa y está teniendo actitudes de tipo troglodita, premodernas, casi cavernarias, que no corresponden a un Estado serio, moderno y desarrollado". Esto, en referencia al caso de los conscriptos que ingresaron de manera ilegal al país.
Previamente, la ministra de Comunicaciones boliviana, Amanda Dávila, señaló que lo ocurrido "irrita a Bolivia".